Nos sumergimos en una (también breve) retrospectiva sonora que ha inspirado el libro de Pedro José Mariblanca Corrales
Autora: Helena Bricio
Ya en el Imperio Romano, Cayo Tito advertía al senado romano que ‘verba volant, scrīpta mānent’, y también el refranero español nos recuerda que las palabras se las lleva el viento, mientras que aquello que se escribe, permanece en el tiempo. Aunque parece que a Cayo Tito se le olvidó la importancia de la tradición oral, articuladora y transmisora de este refranero…
La oralidad cobra una importancia especial cuando se trata de documentar presentes, pasados y futuros, y en el ámbito de la música en general y la electrónica en particular, no nos cansamos de transportarnos y sumergirnos en pistas de baile convertidas en palabras protagonistas de libros como Energy Flash de Simon Reynolds o Der Klang der Familie de Svenvon Thülen y Felix Den.
Esa doble faceta de Reynolds como historiador y a su vez observador participante podemos leerla también en Pedro José Mariblanca Corrales y El trueno que sigue al rayo. El libro se presenta como un análisis y contextualización de la implosión de las músicas de baile en España tras la caída de la Ruta del Bacalao donde el autor hace un repaso por los grandes clubes, deejays, productores, festivales, colectivos y sellos que surgieron tras la irrupción de estos sonidos en el país y aquellos que han ido apareciendo entre los 90 y los primeros años del siglo XXI.
Para amenizar y contextualizar el presente artículo sobre El trueno que sigue al rayo, Corrales nos propone una selección de temas, que si el libro es el rayo de luz dentro del circuito nacional de las pistas de baile, estos temas funcionarían como los truenos, resultando en una auténtica descarga eléctrica que supone una pequeña parte del tejido socio-contracultural sonoro que se desarrolló en España entre los 90 y la primera década de los 2000. Los temas se mostrarán cronológicamente para poder apreciar los cambios y tendencias tanto en el plano melódico como en el plano de la propia producción electrónica.
Esta retrospectiva la abre ‘Hey, Heeey’, del álbum Orange Moon de PG2, un clásico de 1995 publicado en el veterano sello madrileño Quality Madrid. La siguiente pista es ‘Slips (Remix)’ del LP ‘A New Home’ de 1997 de The Frogmen, el dúo madrileño formado por Toni Rox & Leandro Gamez, cuyo álbum entró la lista de los 100 discos españoles mas influyentes del siglo XX de la veterana revista Rockdelux.
Historiador, filósofo y DJ en sus ratos libres, Pedro José Mariblanca Corrales es autor de obras como Tiqqun and the Matter of Bloom in Contemporary Political Philosophy (Little Black Cart, 2015), Niño de Elche. El Golpe que necesitábamos (Brumaria, 2019) o Pensar más allá para hacer más acá (Celya, 2020). Sus colaboraciones en proyectos sociales, políticos, culturales y musicales en diferentes partes del mundo le convierten en un agente nómada que ha conseguido forjarse una buena base de oralidad y narración para documentar y dejar como legado escrito, la historia de las músicas de baile en el conjunto del estado español.
Hemos leído libros sobre la historia de la música electrónica en EE.UU., Alemania o Reino Unido, donde hemos romantizado y ansiado vivir esas raves británicas de principios de los 90, olvidando, a veces, que en España también tuvimos, y tenemos, una gran escena electrónica que ha vivido más en el plano de la estigmatización social que en el plano del enriquecimiento musical cultural. El libro pretende poner en valor toda esa escena electrónica y llevarla hacia una apreciación en términos culturales.
Un claro ejemplo de esa escena es la Discoteca La Real, uno de los clubs míticos de Oviedo, que comenzó en el circuito en 1991 y es a partir de 1995 cuando empezó a crecer el interés del público por las noches de música electrónica, culminando así en la creación de una sesión semanal de este tipo de música. En 1999, el dúo Exium, publica su primer EP, ‘Preface – 001’, que has podido escuchar anteriormente, y del cual solamente se repartieron 50 copias a aquellos DJs que visitaron tanto la discoteca La Real como la discoteca El Jardín, esta última en Gijón. Ahora, en El trueno que sigue al rayo, podemos sumergirnos en territorios que van más allá de Madrid y Barcelona, espacios y clubs que bombean ciudades como Valencia, Granada o Sevilla.
La siguiente pista que Corrales nos apunta es ‘Get Lost’, incluida en ‘A Occhi Chiusi’ del LP de Trolley Route publicado en 2003. Se publicó en el sello londinense de techno dirigido por Mark Broom y Dave Hill, Pure Plastic. Aunque quizá, en lo mencionado anteriormente te hayas perdido un poco y creas que estás con los ojos vendados, conoces a Trolley Route más de lo que te imaginas…
A este mapeo por la historia reciente de la electrónica en España le acompaña una reflexión sociológica sobre las distintas tribus asociadas a la música de baile, así como una crítica a los cambios que sufrió la escena electrónica española tras la crisis del 2008. La crisis con la que muchos crecimos y que marcó nuestra adolescencia, se llevó por delante a numerosos clubes, que después de años de trabajo en el entorno electrónico, patentaron un movimiento cultural que se expondría a una mercantilización posterior. En el libro se reflexiona sobre la importancia cultural de las músicas de baile y el papel de las pequeñas salas, fundamental para desarrollo cultural orientado al club y a las pistas de baile, donde tanto hemos bailado temas como el siguiente de John Talabot, ‘Sunshine’, cuarta referencia del catálogo del propio sello del artista, Hivern Discs, y publicada en junio de 2009.
Para escribir El trueno que sigue al rayo, Corrales se ha rodeado de todo un equipo de colaboradores que son piezas angulares de la electrónica en España, cuyo relato personal de este movimiento cultural queda ahora impreso en papel, porque como decíamos al principio, scripta manent. Músicos y productores como Pelacha, Xpansul, Héctor Sandoval (Tensal), David Sánchez (Clubbingspain) o Ricard Robles (Sónar); auténticos veteranos del circuito como DJ Pepo o Ángel Molina; periodistas como Abraham Rivera, que además escribe el prólogo del libro, o escritores como Joan Manuel Oleaque (a quien hemos leído, en una tónica similar, en En Éxtasis), entre otros, forman parte del catálogo de voces que protagonizan el libro. Para finalizar, la guinda del pastel la pone Cora Novoa, colaboradora también de esta extensa documentación, cuyo ‘Playing in Istanbul’ de 2009 en Hivern Disc esperamos poder volver a escuchar y bailar, muy pronto, en alguna de las muchas pistas de baile que encontramos en El trueno que sigue al rayo.
Podrás encontrarlo online en distintas plataformas como La Fonoteca o Traficantes ¿A que esperas para preguntar por él en tu librería más cercana?