Delicias digitales.
La empresa alemana Behringer ha sido durante las últimas dos décadas uno de los campeones del pueblo – o la mosca cojonera, según a quién preguntes – gracias a la producción de equipo musical con grandes funciones a buen precio. Los consumidores con un presupuesto ajustado han adorado a Behringer por darles electrónica de primer nivel a una fracción del precio de la competencia, mientras que los fabricantes les acusan de robarle su chispa y (supuestamente) sus diseños, llegando incluso a los tribunales con pesos pesados como Mackie, Roland, BBE y DBX. Claro que aquí los ganadores son los músicos con presupuesto ajustado, incluso cuando algunos de los demás fabricantes consiguiesen ganar en su día, a expensas de Behringer.
Mientras al principio la marca tenía mala reputación debido a cuestiones de calidad, últimamente su equipo da que hablar para bien y su estatus en la industria es mucho mejor valorado. El mixer digital DDM4000 de Behringer es un ejemplo clásico de la filosofía de la marca de empaquetar delicias digitales en una caja que presenta un precio increíblemente bajo, que nos brinda todo tipo de funciones al alcance de aquellos que, antes, solo podían soñar con poseer equipamiento de tan alto nivel.
IMPRESIONANTE
El DDM4000 es el mixer estandarte de Behringer, con una reverencia a la gama DJM de Pioneer en su aspecto y la forma en la que consigue aunar tal cantidad de funciones en su caja brillante y negra – pero con un as en la manga: incluso con todo esto, el precio por llevártelo a casa está por debajo de los 350€. El DDM4000 es un mixer de cinco canales, que es la interpretación de Behringer del clásico diseño de canales cuatro más uno clásico, donde el más uno vendría a ser un canal reducido para permitir a los DJs añadir micrófono al procedimiento. El quinto canal del DDM4000 viene con todas las funciones, los mismos controles y características encontrados en los otros cuatro canales, en lugar de uno reducido como dijimos antes. Este mixer también tiene una impresionante gama de funciones, la mayoría de las cuales se han dedicado para poner los controles al alcance de la mano del DJ, así como unos pocos otros que se encuentran entre la configuración que encontramos en la gran pantalla LCD, en el centro del mixer.
A primera vista, el DDM4000 es algo intimidante dado la desconcertante cantidad de potenciómetros, botones, LEDs y otras características que se han hacinado en la superficie de control. Mientras que esto puede intimidar a algunos usuarios, es de hecho algo positivo porque muchas de las funciones de este mixer tienen sus propios controles dedicados, lo que siempre es mejor que tener que presionar el shift para cambiar de función o perderse en el menú de sistema. La presentación de la superficie de control, a pesar de estar abarrotada, es muy lógica y fácil para el usuario que está acostumbrado a usar mixers de cuatro canales de primer nivel y la curva de aprendizaje no es especialmente dura para aquellos que no. Las mejores funciones que se encuentran en este mixer incluyen un sampler digital, dos bancos de efectos individuales con nueve efectos – que se pueden asignar no solo a los canales, sino también a los rangos de frecuencias – así como un sampler digital. Para ponerle la guinda al pastel, los efectos también tienen sincronización de BPMs en todos sus parámetros, lo que hace de su uso una autentica gozada y asegura los delays, reverbs y demás se encuentren perfectamente sincronizados sin la necesidad de activarlos a oído.
BIEN APUNTADO
Cada uno de los canales de fader se encuentran bien apuntados con el usual control de ganancia, botón de selección line/phono, ecualizador de tres bandas, medidores UV individuales para cada canal, así como interruptores de kill para el ecualizador y un modo multi/single que permite que los interruptores de kill cerrar ese rango de frecuencias o todas las frecuencias, excepto ese rango concreto. La pantalla LCD también permite un alto nivel de personalización de los ecualizadores de canal, incluyendo la cancelación de frecuencias de cada potenciómetro, así como el ancho de banda. El canal de micrófono está igualmente bien apuntado, con dos inputs separados y elegibles, ecualizador de tres bandas, efectos para el micro, función de habla, así como un compressor/expander, que va a compensar automáticamente para unos vocales más altos o suaves en el input del micro. Este canal tambiéntiene una vasta cantidad de funciones a las que puede accederse a través del menú de sistema mostrado en la gran pantalla LCD en el centro del mixer. Al DDM4000 no le falta de nada.
Aparte de todo esto, también se ha incorporado control MIDI, para correr programas como Ableton o Traktor y la sección de efectos está llena a rebosar de funciones, con dos bancos de efectos separados, detección automática de BPMs y control asignable del ecualizador de tres bandas. El sampler es igualmente impresionante en términos de características y controles, así como de ser fácil para el usuario al mismo tiempo. Mientras en el apartado de funciones no hay nada que deje de sorprendernos, la única pega que tiene el DDM4000 es la calidad de sonido, que aunque es pasable para un uso doméstico, puede llegar a ser un problema en situaciones profesionales. Pero a este precio siempre habrán concesiones.
VEREDICTO
ACABADO 8.0
USABILIDAD 8.0
CARACTERÍSTICAS 9.0
CALIDAD/PRECIO 9.0
CALIDAD DEL SONIDO 9.0
VENTAJA
Cinco canales, dos bancos de efectos con rangos de ecualización asignables, sampler además de suficientes funciones para mantener a los frikis contentos durante mucho tiempo.
DESVENTAJA
La calidad del sonido no es tan buena como en algunos de los mixers más caros del mercado, pero es pasable por su precio.
Behringer ha conseguido empaquetar una impresionante cantidad de funcionalidades en este mixer a la vez que mantenía el precio por los suelos. Y como tal, este podría ser el mixer perfecto para aquellos DJs con un presupuesto ajustado que no quieren sacrificar funciones por ahorrarse un dinero.
8.5/10
PRECIO 310€
+info: www.behringer.com