Entrevistamos al programador musical de L’Abarset, el mejor après ski de Europa
Foto: David González con Fatboy Slim
¡Hola David, un gusto hablar contigo y tenerte en DJ Mag ES! Cuéntanos un poco para quien no conozca todavía el mejor après-ski de Europa, ¿cómo y cuándo surge L’Abarset?
Lo primero de todo, muchas gracias a vosotros por apoyar nuevas iniciativas y estar durante tantos años haciendo una labor tan necesaria dentro de la industria musical. Vamos al grano; todo empezó hace poco más de diez años, invierno de 2012-2013, un primer formato que se creó de manera muy orgánica con el objetivo de reunir amigos, clientes de la estación y algunos curiosos que pasaban por la zona. La idea era poder tomar algo después de comer en el propio restaurante L’Abarset, una pequeña cabaña a pié de pista donde todos los días acabábamos comiendo después de pasar fabulosos días de esquí. Aquella idea inicial fue creciendo poco a poco y se planteó poder empezar a contratar actuaciones con cierta relevancia para poder escuchar sesiones y música actuales, poder bailar más allá de las cinco de la tarde. Aquel L’Abarset de la noche a la mañana se quedó pequeño, obligando a extender tanto en instalaciones como en equipos de sonido, hasta que acabó transformándose en un auténtico festival. Los “request” de agencias de artistas comenzaron a llegar y pronto, teníamos en cartelería y flyers, conocidos nombres que apostaban por esta nueva propuesta y que decidían hacer un alto en sus giras para poder pasar unos días de esquí, disfrutar de buenas jornadas gastronómicas y actuar. De aquel L’Abarset ahora mismo solo queda el recuerdo, la estación creyó en el proyecto y decidió crear lo que es hoy un referente turístico internacional apostando no sólo por la música, sino por la arquitectura y la gastronomía, llevando a niveles de excelencia la experiencia que se ofrece en el nuevo L’Abarset.
¿Cómo habéis seleccionado a los artistas que participan en L’Abarset? ¿Qué puedes contarnos acerca de la programación electrónica del après-ski?
Que sepan esquiar o hacer snow! hahahah! (Bromas a parte) L’Abarset es un lugar muy singular, sólo acercarte al edificio y entrar lo percibes; puedes imaginar que van pasar cosas muy especiales. Para conseguirlo, hemos definido una estrategia de contrataciones que pasa por una parrilla de agencias y partners con los que trabajamos muy de cerca, conocen muy bien el producto, creen en el proyecto, y ven las infinitas posibilidades que tenemos. Una vez generada esta cadena de valor y planteadas las reglas del juego, son los artistas los que tienen que creer y crear la magia que se genera con sus actuaciones como “headliner”, en una “venue” con una capacidad de poco mas de 1200 personas. Y si además nieva, la magia se multiplica exponencialmente! Obviamente todo pasa también por una selección estratégica del artista y su mercado, una selección musical también amplia, acorde al público, espacio y momento en el que se realizan las actuaciones. No estamos hablando de un club de madrugada, sino un club “open air” en medio de la montaña, rodeado de naturaleza, bosques, nieve donde carisma y artista, querrán disfrutar del momento y levantar a una pista que sabe muy bien lo que ha avenido a escuchar, con sesiones que pasan de las 3h de set, mientras anochece. ¿Épico verdad?
Y hemos visto que durante las dos últimas temporadas han pasado por Grandvalira un montón de artistas increíbles. ¿Cómo está reaccionando el público a la selección de artistas?
Partimos de la base de que Andorra no es Ibiza, el mercado de Andorra en invierno obviamente es turismo de nieve y el usuario principalmente viene a disfrutar del esquí o snowboard. En estas dos últimas temporadas, hemos comenzado a anunciar con antelación la programación y hemos conseguido que seleccionen sus vacaciones en una gran proporción de casos, en función del artista que actúe en L’Abarset. Ese indicador para nosotros es muy importante y nos dice que algo está cambiando; el consumidor de música electrónica identifica a sus artistas favoritos, selecciona y decide los días que viajará. Por otra parte, hemos identificado otra gran porción del usuario de L’Abarset, que sin ser esquiador, acude a los eventos, únicamente por la música o el ambiente (o la magia) que allí sucede. Todo esto nos hace procesar la estrategia de contrataciones, escuchar al cliente muy bien, y saber realmente qué es lo que quiere ver o qué espera del L’Abarset de los próximos años.
Cuéntanos acerca de las próximas fechas de L’Abarset, ¿A quién veremos en cabina?
Por lo pronto, a lo largo de febrero tenemos las actuaciones de Fatboy Slim de la mano de Brunch (in the snow), Richy Ahmed y wAFF con Greenworld, Ben Sterling, Anna Tur, Rafa Barrios, Rendher … entre otros. En marzo no baja la intensidad y tendremos a Arodes, Mind Against y a Wade, además de Lunnas, Fer Mesa, en la semana de las Finales de la Copa del Mundo de esquí. Después podremos ver por fín a Hernan Cattaneo! Ups! igual se me ha escapado … Estamos esperando la confirmación de dos bookings muy atractivos que teníamos ganas de contratar desde hace ya bastante tiempo, no está siendo un año fácil para conseguir ciertos artistas ya que después de la pandemia se han activado fuertemente los mercados sudamericanos y coinciden con nuestras fechas de explotación. Lo que si puedo adelantar es que el cierre de temporada va a ser un bombazo!
¿Qué hace tan especial a L’Abarset? ¿Cómo se relaciona la música electrónica con la nieve?
Ambos términos aparentemente son muy distantes entre sí y hemos conseguido bajarlos a un único lugar, con todo tipo de calidades a nivel acústico y técnico, creando ese lugar mágico del que hablábamos antes.
Los días que se pone a nevar sin parar, el público disfruta a un nivel superior, haciendo único el poder bailar o disfrutar de la música, a manos del nivel de artistas mencionados y nevando… NEVANDO! Esos días no sale ni un alma por la puerta y absolutamente todos nos quedamos hasta el final, aunque tengamos -10ºC ahí fuera. Te invito a que te des una vuelta por el canal de Youtube del L’Abarset, donde hay algunos vídeos de esos días tan mágicos.
Personalmente, lo que hace tan especial a L´Abarset, es la genuinidad y singularidad del propio concepto en sí. Es un club de música electrónica, por y para el deejay, no hay escenarios para grandes conciertos, todo está conceptuado en torno a una magnífica cabina de deejay central con el artista en contacto con su público y como centro de toda la acción, VIP detrás pista delante, ubicado a 1700 metros de altitud, en medio de la naturaleza y rodeado de montañas y bosques. ¡Único!
¿Hay algún artista que también haya aprovechado el forfait de Grandvalira más allá de pinchar? Y en “petit” comité… ¿Hay gente que se acerque a L’Abarset aunque no esquíe?
Muchos de los artistas aprovechan, dentro de sus apretadas agendas y giras, de unos días de desconexión y relax. Es cuando entra en acción la oferta en sí y empieza a coger el valor que nos diferencia. Poder sacar al artista de la madrugada, aviones, hoteles … y llevarlo a la montaña para mi es un placer y para ellos no te puedes llegar a imaginar. Es donde conoces a la persona que hay realmente detrás de la figura del artista y empieza la diversión, el miedo, la adrenalina o a veces algún “sustillo”. Hay artistas que esquían o hacen snowboard, otros prefieren mushing, motos de nieve y algún intrépido se ha atrevido con el heliesquí. Hemos tenido mucha suerte todos estos años y hasta hoy, nadie se ha lesionado o arrepentido, al contrario, los hay fieles que ya en verano están preguntando por esos días de esquí en Grandvalira, organizando sus agendas en L’Abarset, el feedback es realmente muy positivo.
En cuanto a la segunda parte de la pregunta, si; cada vez más, cada vez acude más público no esquiador, o que no ha esquiado ese día que a veces se confunde con el que ha pasado antes por el hotel y se ha puesto el atuendo adecuado para salir a bailar. Tenemos varios indicadores, sobre todo por parte del público residente de Andorra y también obviamente por el “outfit”.
¿Os limita mucho a la hora de producir un evento de música electrónica en el entorno a temperaturas bajo cero?
La meteorología siempre tiene la última palabra, en medios naturales y en concreto, en el formato “open air” que trabajamos. Hemos tenido varias tardes este mismo invierno, sobre todo en enero, donde el termómetro estaba por debajo de -10ºC. A nivel técnico siempre sufres por los equipos, que puedan fallar por exceso de frío. Afortunadamente cada vez más, los fabricantes están teniendo en cuenta esto y los equipos hasta hoy, están aguantando trabajando al 100% de rendimiento. Para nosotros es un “must” en la adquisición de equipos, que cumplan estos requisitos. La otra parte que más preocupa es la humana; hay que transmitir (en mi caso) al artista, las condiciones en las que va a actuar y lo preparado que tiene que viajar sobre todo pensando en el gig. No obstante, la cabina está equipada para poder combatir el frío pero en más de una ocasión, hemos tenido que salir corriendo a alguna tienda de ropa a por refuerzos. De forma secundaria, los días de fuertes nevadas, ha dejado clavado a algún artista en carretera y hemos tenido que ir al rescate. Cosas del día a día.
¿Qué podemos esperar de L’Abarset a corto plazo?¿Y a largo plazo?
En el corto plazo buscamos consolidarlo como un espacio de ocio musical de referencia a nivel internacional donde se llevan a cabo actuaciones exclusivas; un club de referencia con una historia propia. En el largo plazo … “The place to be”
¿Podría L’Abarset ir más allá y convertirse en un festival en algún momento?
Lo cierto es que hay una fuerte demanda, cada año más. El sector festival dentro de la industria está viviendo un momento muy dulce y parece que social y económicamente es un producto con muy buena aceptación y como destino turístico casi una necesidad, no sólo por el negocio en sí sino por el fondo que genera en el entorno empresarial. De todas maneras, L´Abarset es y seguirá siendo un club, con una oferta musical durante toda la temporada de invierno. Un festival se enfocaría a un momento puntual del invierno que coincida con una fecha o marca emblemática.
¡Muchas gracias por tu tiempo!