Amor por la cera.
Texto: Jack Howell & Diego Fernández
Con el repentino auge del conglomerado disco-funk y soul house gracias a la vuelta al vinilo y la aparición y consolidación de figuras, eventos o sellos como Dekmantel, Dimensions, Rush Hour o Favorite Records –entre otros-, parece que las joyas ocultas y olvidadas paridas en los 60 y 70 y ahora revisadas toman la palabra. Una palabra impulsada gracias a tipos como el que ocupa estas próximas líneas; auténticos diggers del vinilo, sonoramente camaleónicos –capaces de actuar en Panorama como abrir eventos como Dimensios o directos de Floating Points en formato banda- o sacar a la luz auténticas bombas de la vieja escuela a través de imprentas propias y afines al sonido mas fresco y funky del momento. El joven francés Jeremy Underground es precisamente uno de ellos; un buceador entre la cera más candente de las décadas doradas del Groove; un maestro de la selección artística; ¡un true vinyl lover!
Cómo estás Jeremy, vayamos al grano. Todos sabemos sobre tu obsesión por la búsqueda de joyas en vinilo siendo éstas lo más importante en tus sets. Pero, ¿sueles tirar de promos que envían artistas anónimos a My Love Is Underground? ¿Es esta también otra de tus fuentes sonoras a las que recurres?
La verdad es que no. Los únicos tracks que tengo en mis USBs son, o promos que van a salir publicadas a través del sello o tracks a los que recurro de manera digital. Mi USB suele estar bastante vacío -más o amenos 30 tracks-. Pero lo que nunca he hecho ha sido ripear alguno de mis discos.
Hablemos de tu progresión sonora. ¿Cómo dirías que ha evolucionado tu sonido en estos últimos años?
Creo que ha cambiado mucho. Cuando empecé e 2010 enfocaba mi sonido hacia un house muy concreto; más o menos el sonido por el que se caracteriza mi sello –MLIU-. Creo que hice bien centrándome sólo en ese tipo de estilo porque me mantuve a flote y pronto la gente se empezó a fijar en él, pero después de unos años empecé a no sentir lo mismo. Me empecé a aburrí del mismo sonido y abrí un poco más mis miras hacia nuevos sonidos. Actualmente no me encasillo en el house; en cualquiera de mis sets puedes escuchar algo de techno, acid, o disco y suelo comenzar y acabar con soul y funk de los años 70. Aún así, sigo considerándome un Dj de house, tirando de cómo mínimo un 75% de set de tracks de house. Pero puede que este porcentaje disminuya en un futuro. Simplemente me tengo que sentir más seguro y a gusto a la hora de mezclar otros géneros.
Siendo un auténtico freak de esos temas del ayer que sabes que revientan las pistas de hoy, ¿tienes algún disco que valores tanto que jamás hayas pinchado en la pista?
(Risas) No, no llego a tanto. Siempre intento pinchar la mejor música que conozco así que jamás restringiría el poder brindar al público semejantes temas. De hecho creo que es al revés, hay muchos discos que pueden viajar en mi maleta durante más de medio año. A veces me pregunto si la gente podría llegar a aburrirse al oír siempre X temas, ¡pero supongo que así soy yo, siempre haciéndome demasiadas preguntas!
Ahora que te cuidas un poco más antes de subir al escenario y has optado por “la vida sana”, ¿has notado alguna diferencia en cuanto a tu conexión con el público? Estando sobrio uno siempre entiende mejor y presta más atención a la conexión, ¿no?
Sí que creo que tengo una conexión mayor con la música pero solo cuando estoy relajado o de buen humor. Pincho mejor cuando estoy sobrio; me concentro más en los niveles, ecualización, etc.
En cuanto a la conexión con el público, depende de éste. Si me ponen a actuar a última hora de la noche y la gente ya lleva unas mierdas del carajo, entonces no siento ninguna conexión. Cuando se respira buen rollo o un ambiente caldeado con el público bailando, siempre me entrego más. Pero creo que es normal. Cada bolo es diferente. Me encanta actuar con un ambiente preparado y ahí es cuando no necesito beber, pero si la fiesta en cuestión no me gusta, el ambiente no es el adecuado o no tengo ningún método de escape, todo me cuesta mucho más.
Cada vez se te ve más actuando en formato b2b junto a diferentes artistas afines con renombre internacional -véase Floating Points, Antal o MCDE-. ¿Con quién te sientes más cómodo en el escenario?
Cuando se trata de sets de house, los que llevo a cabo con mis compañeros de sello Brawther, Tristan Da Cunha & SE62 suelen ser muy divertidos. Llevamos tiempo siendo amigos y eso se nota. Con el paso del tiempo he acabado tocando con Hunee, Floating Points, MCDE o San Soda. Aquí no podría decantarme por nadie. Respeto a todos por igual y cuando hemos actuado juntos solo he experimentado buenas experiencias. No me puedo decantarme por ninguno.
Hablando del formato vinilo, muchos fans de la cera están hartos de ver cómo las copias se venden del tirón para aparecer en poco tiempo en plataformas como Discogs a precios desorbitados. ¿Has pensado alguna vez en considerar algún otro formato más simple para permitir a la gente tener acceso a la música de MLIU en alta calidad? Me refiero a sin ser ripeada o descargada ilegalmente…
No, lo que hago es lo que deberían hacer todos los sellos: planchar copias en relación con la demanda de la referencia. Actualmente sé que una nueva referencia de MLIU se venderá bien porque tenemos una fiel y amplia base de fans, por lo que plancho muchas copias par que todo el mundo esté servido. Es así de simple.
Hacer ediciones limitadas era divertido allá por el 2010 porque la demanda era también limitada, pero ahora la venta de vinilo se ha vuelto a disparar.
Todas esas copias de un sello que “plancha” en vinilo hasta 200 copias y las vende a 50 euros el siguiente día de su salida a la venta frustra a todo el mundo. Mi recomendación es que si tienes un buen disco hagas una buena cantidad de copias. Si ves que se está vendiendo muy rápido, ¡haz un maldito repress y listo! Parece que muchos dueños de sellos se sienten mejor diciendo que sus discos se venden a 50 euros en menos de un día. Eso es una auténtica estafa. ¡Si realmente no quieres que nadie tenga tu disco, no lo saques!
A la hora de publicar nueva música te codeas con una serie de amigos y productores excepcionales como Brawther o Tristan, pero ¿cómo os está funcionando el sello? ¿Qué puntos de mira tiene en un futuro próximo?
Nos hemos permitido el lujo de tomarnos 2 años y medio de pausa sonora. Simplemente decidimos relajarnos un poco, ver y estudiar qué dirección estaban tomando las cosas y priorizamos nuestra carrera como Djs. En mi caso, volveré a publicar nuevos trabajos cuando tenga proyectos excitantes de verdad en mis manos. Jamás me forzaré para publicar nada que no sienta de verdad; solo quiero seguir haciendo que esto me divierta como en mis comienzos. Ese ha sido el plan desde que empecé en el mundillo.
Con un sello con base de operaciones en Leeds, ¿sueles dejarte caer por allí? ¿Ves alguna conexión o influencia especial entre la ciudad y MLIU?
Solía estar bastante tiempo en “L.Town”, pero desafortunadamente ya no paso tiempo allí porque no me contratan tan a menudo; o por lo menos no tanto como en Manchester, por ejemplo. Pero claro, siempre hecho de menos a los colegas de por allí…
¿Qué hay de tu día a día? Cuando no estás de tour, ¿cuánto tiempo al día pasas rebuscando nuevas joyas qué ofrecer? ¿Por dónde sueles buscar?
Soy un tipo al que le gusta el día. Hago mis cosas por la mañana, compruebo lo que me mandan mis amigos vía RRSS, compruebo las últimas subidas a canales de Youtube de calidad a los que estoy suscrito, pongo al día mis pedidos de Discogs (compras y ventas) o hago limpias diarias de amigos en Facebook; solo quiero a la gente que me aporte cosas innovadoras o interesantes. Eso es básicamente a lo que destino mi tiempo libre en torno a la búsqueda de nuevos sonidos. Me puedo pasar así más de 3 horas al día…
Hablando precisamente de esas joyas ocultas que te has ido encontrando a lo algo de tu carrera, mayoritariamente compartiendo cabina contigo ¿qué Djs destacarías por hacer un trabajo excepcional? Los residentes a veces no llegan a gozar de ese respeto y exposición que deberían. Quizá puedes contarnos de algún caso que creas merezca la pena reseñar en estas líneas…
Te diré algún nombre aunque en realidad no sigan siendo residentes (pero anticipo que soy muy fan de ver los warmups de los residentes de los clubes en los que actúo). Dan Shake tiene una energía brutal y a Red Greg le considero el mejor Dj de disco del mundo. No hay nadie más infravalorado que él. También destacaría gente de mi alrededor como Hugo LX y una chica joven, Clementine.
Creo conveniente resaltar, y aunque no venga mucho a cuento, que hay tantos grandes Djs a los que no he podido todavía ver actuar…en mi caso, tengo bolos cada viernes y sábado por lo que solo puedo ver a los que actúan en el mismo line up que yo…
Eres uno de los favoritos en la plataforma de Boiler Room. ¿Qué opinas del streaming en directo? ¿Lo concibes como algo bueno para la Industria o al revés, tiene demasiados aspectos adversos?
Boiler Room ha cambiado las reglas del juego. Eso es innegable, y en mi opinión para bien. Evidentemente no todas las sesiones de Boiler Room son buenas pero una buena BR puede definir el momento de un artista o marcar un punto de inflexión en su carrera. Y no te diría que esto no fuera mi caso con una de las actuaciones para ellos en Paris el pasado año. Simplemente se trata de una forma más simple de darte a conocer a un público más amplio. Es divertido verlo y llama más la atención que los ya casi extintos podcasts. Para los clubbers más jóvenes, ¡es como si te vieran en la televisión!
¡Gracias por tu tiempo Jeremy!
¡Gracias a vosotros!
*M My Love Is Underground (12 Other House Tracks) ya está a la venta en formato 3 x Vinilo a través de Favorite Records.