Una recopilación de piezas electrónicas compuestas para sintetizador y grabadas entre 1983 y 1989 por la pionera venezolana de la electrónica
Foto: Carlos Ochoa
Oksana Linde pertenece a esa misma estela creativa que iniciaron artistas como Delia Derbyshire, Suzanne Ciani, Laurie Spiegel o Éliane Radigue, de quien hace poco hicimos una pequeña retrospectiva.
Como ellas, Oksana Linde supo crear un universo personal a partir de la exploración de los sonidos electrónicos y hacerse un hueco en un entorno mayoritariamente masculino. Ahora, publica su primer álbum, ‘Aquatic and others worlds’, que recopila sus piezas electrónicas a sintetizador grabadas entre 1983 y 1989.
Nacida en 1948 en Caracas, Venezuela, en el seno de una familia de inmigrantes ucranianos, el trabajo de Oksana Linde se dio a conocer ya en la década de los 80, coincidiendo con el surgimiento de una nueva escena venezolana de música electrónica protagonizada por los sintetizadores, con nombres como Ángel Rada, Miguel Noya, Musikautomatika, Vinicio Adames, Oscar Caraballo, Aitor Goyarrola y Jacky Schreiber.
En 1981 y a sus 33 años, Oksana Linde dejó su trabajo como investigadora por el estado de su salud y empezó a dedicar más tiempo a la música y a la pintura. En esta época, consiguió adquirir un sintetizador Polymoog, una grabadora de carrete abierto Teac y un Moog Source. Con ese equipo se hizo su pequeño estudio en casa y empezó a componer sus primeras piezas en 1983-1984.
Poco a poco fue ampliando su equipo, adquirió un mezclador de 16 canales, una Roland Tape Echo, una caja de ritmos TR505, un Korg M1, y ya años después un Korg TR88.
Entre 1984 y 1986 grabó más de 30 piezas y entre 1989 y 1996 siguió produciendo otras 30 piezas más, acumulando así un gran archivo que se ha mantenido inédito.
La música de Oksana Linde puede ser intensamente hipnótica y psicodélica pero también melódica y lúdica. Linde programa y toca todos los instrumentos, desarrollando líneas melódicas que se superponen a loops y secuencias con diversas capas de sonidos reverberantes y flotantes que van y vienen, y establecen siempre una narrativa cinematográfica.
El trabajo y los avances que las mujeres aportaron a la música electrónica en América del Sur es uno de esos ámbitos que se va investigando cada vez más y del que solo se ha descubierto una pequeña parte.
La presencia del sintetizador en las músicas experimentales, progresivas y electrónicas a partir de la década del 70 está asociada casi exclusivamente a figuras masculinas en Sudamérica, y es por ello que el trabajo de Oksana Linde adquiere particular relevancia. Ella misma se erige como una figura que rompe esa hegemonía y cuya extensa producción la posiciona a su vez como una de las más prolíficas y notables exponentes de la música electrónica.
El trabajo de Oksana Linde y la publicación de este álbum brindan una oportunidad de acercarse a un universo de sonidos inesperado, una señal de otra historia que está por escribirse.
El álbum fue compilado por Luis Alvarado, incluye notas de Oksana Linde, Ale Hop y Luis Alvarado y la portada está diseñada por René Sánchez.
Ya está disponible en formato digital y en junio se empezará a enviar la edición limitada de 300 copias en vinilo.
Puedes escucharlo y hacerte con el tuyo a continuación: