Eclecticismo sin géneros
Autor: Diego Fernández & Eduardo Pérez Waasdorp
Para los amantes de la variedad musical más gamberra y ecléctica, hay pocos artistas que representen mejor esa filosofía de libertad musical y vital que el colectivo londinense Horse Meat Disco. Formado por James Hillard, Jim Stanton, Luke Howard y Severino Panzetta, lo que empezó siendo una reunión para presentar sus perspectivas musicales en un ambiente sin ataduras, de respeto musical y mente abierta dentro de la escena gay de Londres, se ha convertido de uno de las fiestas más queridas de la ciudad, tanto por el público queer como heterosexual, y que se ha ganado a pulso el derecho de residencia en plazas tan complicadas e icónicas como Nueva York, París o Berlín. Siendo una sesión demandadísima en clubes de todo el globo y a punto de desembarcar con su mezcla de sonidos de ayer y hoy para cerrar el temporadón de Soundeat en Barcelona, nos sentamos con uno de sus miembros, Luke Howard – alias Filthy Luka – para que nos cuente los secretos mejor guardados y los entresijos de la sesión más ecléctica, gamberra y dicharachera de la capital británica. ¡Música, maestros!
¡Muy buenas, Luke! ¡Gracias por tu tiempo! Horse Meat Disco empezó los domingos en el club The Eagle de Vauxhall. Sin embargo, ahora se ha extendido por muchos otros lugares, bien sea con vuestras residencias o como invitados. ¿Cómo os conocisteis? ¿De dónde vino la idea de formar el colectivo?
Bueno, Jim y James son los promotores de la fiesta y ellos nos conocían a Severino y a mí porque ya éramos DJs, en Londres, y nos pidieron que pinchásemos unas cuantas veces. Al principio había más invitados, pero al final nos quedamos los cuatro como residentes y ya éramos amigos y nos conocíamos de la escena gay en Londres… ¡Eso fue básicamente como empezó todo!
Sois cuatro y funcionáis como un equipo de relevos… ¿Alguna vez hay demasiada gente detrás de los platos?
La verdad es que no (risas). Cuando tocamos en The Eagle cada uno hace su propio set y nos partimos el tiempo equitativamente y cuando nos vamos fuera normalmente vamos dos de nosotros, por lo que tocamos b2b, o somos flexibles y tocamos una hora cada uno o media hora… Pero no suele haber problemas, porque normalmente vamos solo dos. Y si vamos los cuatro nos repartimos el tiempo, porque de otra forma somos demasiada gente…
¿Funcionáis como otros grupos, que se reparten por varias ciudades la misma noche? ¿Cómo manejáis vuestra agenda?
La verdad es que tenemos suerte, porque al ser cuatro podemos hacer lo que dices, de repartirnos, aunque cada equipo no viaje a más de una ciudad en una noche ni cosas así. Vamos dos a una ciudad y dos a otra. Compartimos el trabajo y todo depende de quién esté disponible y quien no, y nos manejamos así…
¿Y en el estudio? No tenéis muchos EPs… ¿El tener tantas residencias y actuaciones es lo que os impide meteros más en el estudio?
Bueno, este año sacamos un single, y estamos trabajando en los que viene… Pero al final somos DJs. Hace unos tres años sí que hacíamos más demos, incluso tenemos música para rellenar más de un álbum – uno que por cierto nunca acabamos – y ahora estamos terminando, pero con la calma, no tenemos ninguna prisa y también trabajamos con Luke Solomon, que nos está ayudando a acabarlo. Pero como te digo no hay prisa, somos afortunados porque nos hemos podido concentrar en nuestras carreras como DJs y en los recopilatorios que hemos sacado, que nos han dado bastante visibilidad…
Es curioso que vuestro éxito viene casi exclusivamente por vuestros sets, y no tanto por vuestras producciones… Sois una excepción en la escena, ¿no?
Bueno, en ese aspecto somos afortunados. Creo que ese factor viene porque una de nuestras características principales es que no solo tocamos música house, también ponemos muchos clásicos y música antigua, en eso nos diferenciamos de muchos DJs, incluso si nos contratan en clubes en los que la gente suele poner música más contemporánea… Nosotros nos concentramos en muchos géneros, somos más eclécticos. No solo somos DJs de house, ni nos limitamos a pinchar edits, nosotros lo mezclamos todo, somos muy versátiles. Y en verdad, hasta cierto punto, está claro que hay demasiada música. Está bien hacer tu propia música y tocarla, y tener mezclas exclusivas hechas por ti, pero hay tanta música que yo, personalmente, como DJ, quiero encontrar la mejor que haya, sea de quien sea, y quiero poner la música que me gusta. Al final no somos músicos, somos DJs…
El concepto detrás de vuestras fiestas se inspira en la vida nocturna de Nueva York durante los 70, 80 y 90… Suponemos que lugares como el Paradise Garage, el Limelight o Studio54, ¿llegasteis alguno a experimentar la vida nocturna de la ciudad en esa época? ¿Hay algún aspecto que intentéis revivir o reinterpretar?
Bueno, primero que nada, no es que hayamos intentado emular esos clubes de ninguna manera, ni siquiera una versión. Nosotros admiramos y respetamos la historia de los clubes, especialmente de los clubes gay, y nos honra que cualquiera nos compare con esos sitios, pero nunca hemos tratado de emularlos. Tan solo queremos hacer una buena fiesta, una fiesta divertida… A nosotros nos han inspirado nuestras distintas experiencias en la vida nocturna de diferentes lugares y ninguno llegó a ir al Paradise Garage, por ejemplo. Yo llevo yendo a Nueva York desde los 80, en concreto desde el 86, pero nunca llegué a ir al Garage. Nueva York me ha inspirado mucho, por su música, la música que sus DJs han tocado.
Pero nuestra fiesta no es para nada como eso. Nuestra fiesta es muy de Londres, aunque siempre nos ha encantado la música de Nueva York. Yo llevo muchos años yendo allí, y como te decía me ha inspirado mucho en mí carrera como DJ y me encanta salir en Nueva York, me siento honrado de haber podido pinchar allí, es un gran honor para todos. Es un lugar tremendo, con una gran historia y nos sentimos humildes ante la comparación, pero nunca hemos tratado de emular ninguno de esos sitios… No podríamos compararnos con ellos. Al final de lo que se trata es del ambiente, la energía y crear un espacio donde la gente se pueda divertir y bailar, quizá de allí salgan las similitudes: darle a la gente un lugar seguro donde poder bailar y ser quienes son.
Al principio, vuestras sesiones eran consideradas parte de la escena queer/LGTB. Sin embargo, os habéis convertido en una referencia de la escena en general por vuestra música… ¿Dirías que venir de esa escena os ha abierto puertas o, por el contrario, os ha impedido llegar a algunos lugares?
Bueno, nunca nos hemos querido desligar de la escena LGTB, al contrario. Somos parte de la comunidad LGTB, de la familia LGTB… Sinceramente, creo que no ha tenido ningún impacto en nosotros. Pero, de todas formas, sí que ha habido países a los que no hemos querido ir por lo que estaba ocurriendo o que hemos pensado que no nos iban a dar la bienvenida… Pero por suerte no hemos tenido malas experiencias. Obviamente queremos pinchar donde nos sintamos seguros y donde nuestro público LGTB se sienta y esté seguro, y eso, obviamente, nos incluye a nosotros, como hombres gais que somos. Supongo que lo que intentamos es dar un espacio donde todo el mundo se sienta bienvenido, si bien en Londres pinchamos para un público eminentemente LGTB, en otras ciudades de Reino Unido o Europa quizá haya más público heterosexual.
Lo cierto es que en nuestras sesiones siempre hay una gran cantidad de público LGTB y siempre nos gusta ver caras conocidas en el público donde quiera que pinchamos, aunque si nos vamos fuera tampoco podemos decidir quién va a ser nuestro público, tan solo nos contenta que la gente nos quiera venir a ver pinchar y lo único que queremos es brindar un espacio seguro para que todos puedan hacerlo. Y creo que normalmente lo conseguimos, porque, aunque no tengamos los mismos gustos, juntamos personas con el mismo tipo de mentalidad.
Hemos leído que uno de los factores clave para que creaseis HMD es tener una fiesta con una política de admisión más inclusiva. Sin embargo, entrar en algunos clubes hoy en día no es tan fácil como algunos puedan creerse, solo hay que pensar en sitios como Berghain… ¿No es un poco raro que las cosas hayan cambiado tanto con el tiempo que es más difícil entrar en algunos clubes queer/gay que en clubes sin esta etiqueta?
Realmente no sé qué contestarte (risas). Nosotros somos muy abiertos y tampoco quiero comentar sobre las políticas de otros… Creo que, a veces, ciertos lugares tienen una política de admisión estricta porque quieren mantener el espacio para su clientela original o para la gente en la que se pensó la fiesta. Por eso entiendo que haya políticas de admisión. Algunas veces hacemos una fiesta en otro club y se venden las entradas antes, online, y cuando volvemos a ir el promotor nos dice que prefiere venderlas en la puerta porque así sabrán quién ha venido y, a veces, se busca que el público tenga la misma mentalidad abierta sobre la música. A lo que voy es que entiendo que haya políticas de admisión, a veces es necesario, pero nosotros no la tenemos. En The Eagle todos son bienvenidos, siempre y cuando respeten a los demás. Nuestra política es “No seas un capullo” (risas). Así es como te dejamos entrar en nuestra fiesta (risas).
Suponemos que habéis asistido a fiestas gay legendarias de Londres como The Beautiful Bend de DJ Harvey, Kinky Gerlinky, Taboo, The Hippodrome o Busby’s, entre otras… ¿Cómo valorarías la evolución de vuestra fiesta a partir de esas ideas iniciales?
Bueno, yo soy el más viejo de los cuatro (risas), por lo que he sido el único en experimentar todos esos clubes, excepto Taboo, aunque soy gran amigo de su promotor, y vivía en Londres durante la época de Taboo. Tanto Severino, como Jim y James son más jóvenes que yo o no salieron tanto por Londres como yo, que si tuve la oportunidad de experimentar Kinky Gerlinky y las otras fiestas que has mencionado. Y la cosa con los clubes y la vida nocturna es que todo evoluciona y creo que eso ha ocurrido de una forma orgánica… No creo que nadie monte un club pensando “voy a ser el siguiente eslabón de la cadena en la historia de los clubes”. La razón principal por la que nos dedicamos a esto es porque nos gusta. No vas a buscarte un trabajo de noche si no te gusta. Yo adoro los clubes, desde que tengo 14 años, porque me encanta este ambiente. Todas las fiestas anteriores eran geniales, pero me gusta vivir en el presente, disfrutar de la gente de ahora, en lugar de revivir el pasado. Uno respeta ese pasado, hay que conocerlo porque es importante, pero hay que intentar crear la diversión en el momento, en lugar de pensar que todo tiempo pasado fue mejor…
Además de Londres, tenéis residencias en París, Berlín o Nueva York… El público, ¿es muy diferente en unas y otras?
¡Totalmente! Creo que donde tenemos residencias el público es mucho más gay. Cuando nos invitan a pinchar, como te decía, sí que es un público más hetero, pero, por ejemplo, el público de Berlín es muy gay, muy abierto… La gente de Berlín es muy abierta de mente hacia la música, empiezan a bailar desde el principio… El público de Nueva York también es bastante gay y masculino, diría, aunque, obviamente todo el mundo es bienvenido. Lo que sí que me ha sorprendido es que el público en Nueva York es muy joven, y nos sentimos muy afortunados de tener un público así que quiera venir a oírnos.
A menudo ponéis temas raros de disco y otros géneros, ¿dónde encontráis vuestra música? ¿De viaje? ¿Tenéis alguna tienda predilecta?
Bueno, en Londres compramos nuestra música en Love Vinyl, que es una gran tienda… Yo compro mucho en internet, en eBay, Discogs, también compro mucho en Nueva York, cuando voy… Y si voy a una ciudad una de las cosas que quiero hacer, además de conocer el lugar e ir a alguna galería de arte, es ir a una tienda de discos y al supermercado – sobre todo para ver la comida diferente en cada lugar.
¿Y qué hay de los edits? Con el revival de la escena edit, ¿os llegan muchas peticiones os llegan para conseguir los vuestros?
Intento no pinchar edits, aunque tengo que reconocer que ahora pincho más de los que solía. A veces sí que hago mis propios edits, pero no los publicaría… Encuentro que muchos de los edits son aburridos, le quitan la diversión a la música, sobre todo porque muchas veces les quitan los vocales y por eso no me entusiasman mucho. También es verdad que hay gente que hace muy buenos edits, y siempre me gusta oír nuevas versiones de temas que ya conozco para ver lo que ha hecho la gente, aunque hay muchos que son aburridos. Por eso prefiero poner el original…
También parece que las compilaciones funcionan bien de nuevo… No hay nada más que ver la que acaba de publicar DJ Harvey en el sello de Pikes, las de Dekmantel o las que habéis publicado vosotros, como la última entrega de junio… ¿Qué es más difícil, escoger los tracks, mezclarlos u ordenarlos correctamente?
Bueno, creo que lo más difícil de hacer una compilación es conseguir la licencia de los tracks. Muchas compañías no quieren licenciar sus temas o darte los derechos digitales de sus trabajos. Pronto sacaremos una compilación en Z Records, el sello de Joey Negro, en la que usaremos temas que el sello ya ha licenciado, y que será una publicación solo digital. Por suerte hemos conseguido unas cuantas gemas disco geniales, raras y underground, que hemos podido usar de su catálogo. Se va a llamar ‘Meet Me At The Disco’, y será solo para descarga digital.
¿Dónde y cuándo es el mejor momento para disfrutar de una sesión de HMD? A parte de The Eagle y vuestras residencias, claro…
Nos encanta Glasgow, Leeds, Lisboa, Ibiza, algunos festivales como Glastonbury son geniales… Hay muchos sitios, Dublin en Irlanda siempre es divertido, Bristol, Los Ángeles…
La última vez que vinisteis a España peninsular fue al pequeño Marula Café de Madrid. Ahora es el momento de Soundeat en Barcelona… ¿Cómo os preparáis para sitios tan diferentes? ¿Os gustan más los sitios pequeños o los grandes escenarios?
A mí, personalmente, me gusta la intimidad de un club pequeño. La última vez que estuvimos en España fue en Ibiza. A lo largo del verano hemos hecho como siete fechas, varias para Glitterbox, Severino tocó en DC10 para Disclosure…
Lo que te decía, me gustan los sitios pequeños, gente con la mente abierta. Para nuestra siguiente fecha seguramente nos sentaremos y miraremos qué vamos a tocar, ciertamente será diferente porque es un gran escenario. Desde luego lo que no hacemos es decir “Como vamos a España deberíamos tocar esto o aquello”, aunque sí que tenemos un par de ideas sobre cosas que nos gustaría pinchar cuando vayamos, unas mezclas de disco-flamenco bastante buenas…
Hablabas de vuestro verano en Ibiza… ¿Cómo veis la actualidad de la isla? ¿Experimentasteis el ambiente original de la isla?
Bueno, no tanto en verdad. Nunca he sido de ir mucho a Ibiza. Soy un raver de la vieja escuela, estuve allí cuando surgió el acid house, a finales de los 80 en Londres, pero nunca fui a Ibiza hasta finales de los 90. Lo que te puedo decir es que una de las fiestas que más me gusta es Glitterbox, es un tipo diferente de música a la que se suele oír en el resto de la isla, por lo que es genial formar parte de algo que sea así de novedoso y especial.
¿Habéis estado en las festividades del Orgullo Gay de Madrid? ¿Os gustaría venir a tocar el año que viene?
¡Quizá! ¡Nunca he estado en el Orgullo de Madrid! ¡Seguro que me divertiría mucho! Me encanta España… También estuvimos en un festival en San Sebastián en septiembre que me encantó, es una ciudad que me fascina, me quedé allí para mis vacaciones. Incluso hablo español más o menos un poquito [habla en castellano]. España siempre es un lugar especial, aunque más allá de Ibiza no hayamos tocado asiduamente en ninguna ciudad. Hemos tocado algunas veces en Barcelona, en Razzmatazz…
¿Sabíais que vuestro nombre lo ha copiado una peluquería de Brisbane, en Australia?
¡Sí! Conocemos su existencia y es gracioso. No tenemos problema con que usen nuestro nombre (risas).
Finalmente, Luke, ¿qué es lo siguiente en la agenda de Horse Meat Disco?
Bueno, aparte de la compilación en el sello de Joey Negro, estamos terminando dos o tres singles, con Amy Douglas en los vocales, así que estad atentos a ello porque van a salir pronto. Ahora nos toca descansar un poco antes de navidades, porque ¡ya tenemos la mirada puesta en el verano que viene!
¡Muchísimas gracias por tu tiempo!
¡A vosotros!
* Extraído de Dj Mag Es 082